Vino bien fresco, frutal, un vino al estilo natural, con la menor intervención posible. Es 100% joven, es decir que no pasó por ningún proceso de crianza, ni contacto con roble. Se utilizan las levaduras naturales (las que están en la piel de la uva). No contiene sulfitos agregados (los sulfitos son derivados del azufre que se emplean como aditivos en muchos alimentos, entre ellos en el vino, por sus propiedades conservantes, antifúngicos, antimicrobianas y antioxidantes).
Solemos tener posicionados los Cabernet Sauvignon como vinos con demasiados taninos y estructura, diferente será este caso que se trata de un vino jugoso, frutal, con taninos suaves y un final delicado.